domingo, 20 de mayo de 2007

ansiedad axilar

Me vino el recuerdo insolente de esta historia...

Empezó caminando, entre el frio, nos sentamos y de golpe entre sorbos me contaste un gran pedazo de tu vida, y akello ke pudo haber parecido tan mentira, era verdad.
Aunke mi orgullo sangre al decirlo al principio todo era suficiente, pero yo sabia, sentia esa mano debajo de la piel apretando el estómago.
Creí nunka perder la consciencia, aun así me permití abiertamente y sin control sentir esa satisfaccion a la altura del hombligo, respuesta felina de contentamiento ke da el kuerpo, sensación ke se acurruca comodamente entre las costillas, la barriga y la planta de los pies.
Y el tiempo paso........
Para verte como yo kería era necesario cerrar los ojos, entonces tenía sentido el alejamiento........Se le abandona como se posa en la mesa la copa vacia, como se cierra un paragua mojado, se cumplió, se terminó a la hora exacta. Me sacudí el agua del sueño y vi ke todo estaba bien.
Te movías como caballo de ajedrez, me hartabas con tus manías, tu ropa, tus zapatos, tu nariz, tus preguntas de cultura musical, tu fuerza, tu ausencia, tu atenta desatención, tus ojos analizando tu piel en el reflejo de la ventana, tu autarquia y por eso talves esta persistente ansiedad de volver al punto tibio.
Cuantas veces tirada en una cama, ke no se tendía por muchos dias, fui testigo, fui espía. Siempre supe ke tus besos eran como ojos ke empezaban a abrirse más allá de mi y ke andabas como salido, volcado hacia otra figura del mundo.
En fin no pretendo explicar nada más.-
Mi sentir es contrario a mi pensar, pero así son las ansiedades.

HAY KE SER IMBÉCIL, HAY KE SER POETA, HAY KE ESTAR EN LA LUNA PARA PERDER MÁS DE CINCO MINUTOS EN ESTAS NOSTALGIAS PERFECTAMENTE LIKIDABLES A CORTO PLAZO.

1 comentario:

pepa dijo...

uuuuuuuuuuuuu..buena!
que grato encontrarte por estos lados bloguísticos, ya ves que nunca te escribí un mail, pero no ha habido encuentros ni planes como para comunicar...
como ves también tengo una extensión en la quinta dimensión, así que te agregaré para poder visitarte en cada antojo

un abrazo
eli
(sí, la misma niña de siempre)